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Las pérdidas auditivas tienen solución

La sordera es la deficiencia auditiva más común en el mundo, pues se estima que entre un 15% y un 20% de la población sufre este tipo de problemas. Afecta, especialmente, a las personas mayores, ya que el sistema auditivo va deteriorándose con la edad.

La deficiencia auditiva origina problemas de comunicación, que se reflejarán en la manera de ser y de estar de la persona que la padece. Es posible que cause aislamiento y soledad, además de depresiones , lo que se refleja negativamente no sólo en su ámbito profesional, sino en su entorno familiar y de amigos o de relaciones sociales.

La sordera puede ser causa de envejecimiento cerebral

Estudios realizados en la Universidad italiana de Catania revelan que la sordera puede ser causa de envejecimiento cerebral, ya que los estímulos auditivos constituyen una parte esencial en la activación de las células del cerebro, lo que supone que un anciano con problemas de audición que no corrija su deficiencia perderá memoria, reflejos y capacidad intelectual mucho más deprisa que un anciano que oiga bien.

Algunos científicos han llegado a decir que el oído es el órgano que despierta el cerebro, ya que le proporciona el 70% de los estímulos que recibe, mientras que, al contrario de lo que pueda pensarse, la vista sólo aporta el 20% y el resto de los sentidos el 10%.

En España existen más de 2 millones de personas que sufren problemas de audición, lo que supone el 7% de la población, porcentaje que asciende hasta el 30% en los mayores de 65 años.

Aislamiento, depresión y angustia

A pesar de que las deficiencias auditivas provocan en las personas que las sufren aislamiento, depresión y angustia, la mayoría de las familias no dan a la sordera la importancia que tiene, al considerar que es un trastorno propio de la edad, con el que hay que resignarse a vivir.

Nada más lejos de la realidad actual, en la que los avances tecnológicos han permitido que 80 de cada 100 casos de problemas auditivos puedan resolverse con un pequeño aparato corrector, llamado audífono.

A pesar de lo que pueda pensarse, no todas las pérdidas auditivas son iguales, ni se corrigen con los mismos audífonos. Cada problema de audición es distinto en cada persona y, por tanto, las prótesis deben realizarse a su medida y después de un pormenorizado estudio, por parte de un profesional especializado, el técnico audioprotesista.

Audífonos digitales inteligentes

La última tecnología son los audífonos digitales inteligentes, que reproducen el sonido de la forma más natural y similar a la de un oído sano, ya que no producen distorsiones, son totalmente automáticos y se adaptan a cualquier tipo de  ambiente, haciendo totalmente cómoda y nítida la audición.

Potencian la comprensión del habla en ambientes ruidosos y permiten oír sonidos suaves, que hasta ahora pasaban desapercibidos, de tal manera que algunos fabricantes han llegado asegurar que “sólo la naturaleza pudo hacerlo mejor”.

A pesar de su reducido tamaño, reciben constantemente todos los sonidos producidos a su alrededor. Antes incluso de que oigan un sonido intenso, estos audífonos harán que sea más confortable para ustedes. Mientras hablan con un amigo, se centrarán en la conversación y suprimirán todos los demás ruidos. Antes de que nadie oiga los pitidos que se producen en otros audífonos, estos aparatos los habrán detenido en sus circuitos. Son tan rápidos que, incluso, pueden suprimir el ruido de fondo entre las sílabas de las palabras que oye.

Su calidad de sonido es comparable a la de un Compact Disc, con respecto a un disco de vinilo y su adaptación se realiza a través del ordenador, lo que permite adecuar cada parámetro a las necesidades específicas de cada persona. Además su estética y color son inmejorables, lo que permite que se confundan con su color de pelo o de piel.

Los usuarios de audífonos son personas más activas

Es importante destacar que los usuarios de audífonos son personas más activas, puesto que al oír pueden participar más de su vida social, no sólo en familia, sino en reuniones y conferencias, además disfrutan de una  mejor salud psicológica más alejada de las depresiones, puesto que, cuanto mayor es una pérdida auditiva, los afectados tienen una tendencia más acusada a aislarse de su entorno y estar más irritables.

Al respecto, un estudio realizado en Estados Unidos analizó los cambios que se producen en un usuario de audífono y en su entorno familiar y social en cuanto a sus relaciones en casa, sentimientos sobre uno mismo, vida en general, salud mental, confianza en uno mismo, relación con los hijos/abuelos, participación en grupos de actividades, sentido de la independencia, de la seguridad, aptitud para jugar a las cartas o juegos de sociedad, vida social, salud física, dependencia de los demás, relaciones en el trabajo, aptitud para practicar un deporte o en la vida social.

Un audífono mejora su calidad de vida

La conclusión a la que llegaron, tanto los usuarios de audífonos como sus familias, es que al comenzar a usarlos su calidad de vida mejoró considerablemente.

Concluía el estudio que quienes se adaptaron un audifono  destacaron una importante mejoría en tres cuestiones, para ellos fundamentales: las relaciones en su casa, la autoestima y la vida en general.

Consejo ante una pérdida auditiva

Acudir a un profesional cualificado, el técnico audioprotesista, que  le realizará una serie de pruebas especiales, para determinar su problema auditivo y orientarle sobre la mejor solución, para solventar esta deficiencia, explicándole, con claridad, los pormenores de su adaptación y haciendo un seguimiento de su nueva vida con su audífono, en caso de necesitarlo.

 

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